Por STEPHEN CASTLE 13 y 14 de noviembre de 2018 NYT
Friday 8 March 2019, by Carlos San Juan
Los funcionarios británicos y europeos por fin alcanzaron un acuerdo tentativo para la salida del Reino Unido de la Unión Europea, lo que allana el camino para que el esperado pacto sea debatido por los ministros del gabinete de la primera ministra británica, Theresa May. El jueves 15/11/2018 el consejo de ministros del Reino Unido aprobo el acuerdo. Ahora debe discutirse y aprobarse (o rechazarse) en el Parlamento británico y en el Parlamento Europeo. El acuerdo actual mantiene la actual situación de la frontera (invisible) entre la República de Irlanda y la británica Irlanda del Norte ya que incluye la permanencia del R.U. en el mercado único europeo después del Brexit.
El borrador de acuerdo de 585 páginas crea un período de transición de statu quo. Durante ese tiempo, muy poco cambiaría hasta fines de 2020, pero los negociadores apuntarían a establecer un acuerdo comercial.
El pacto para la salida del RU de la UE cubre tres áreas principales: la solución financiera para el divorcio; los derechos de los ciudadanos británicos en el continente y de los ciudadanos de la Unión Europea en Gran Bretaña; y un mecanismo para asegurar que no haya una frontera dura entre Irlanda, en el bloque, e Irlanda del Norte, en el Reino Unido.
El Reino Unido y la Unión Europea por fin llegan a un acuerdo para el brexit.
Prime Minister Theresa May’s cabinet approved a draft deal with the European Union on the country’s withdrawal from the bloc, set for March. The deal still needs approval from European leaders and the E.U. Parliament. But the hardest test will be the British Parliament, where a maelstrom of opposition awaits. The agreement would give the E.U. and Britain until 2020 to work out a trade deal, essentially maintaining the status quo until then. Hard-line Brexiteers argued that it would strand Britain under E.U. rules that Britain would have no say in making. And its complex scheme for avoiding a hard border in Northern Ireland has already generated anger. But Mrs. May, seen above in front of 10 Downing Street, is betting that pressure to avoid a potentially disastrous “no-deal” Brexit will overcome critics in the end.(NYT, 15/11/2018)